El surf y las furgonetas siempre han estado estrechamente ligados, y, por ello, viajar sobre ruedas permite moverse con las marejadas, dormir junto a la playa y despertarse con las olas rompiendo a pocos metros. Esta combinación no solo representa una forma práctica de surfear más, sino también un estilo de vida: más libre, flexible y conectado con la naturaleza. De este modo, preparar tu furgoneta para una ruta de surf es mucho más que adaptar un vehículo, es crear tu refugio móvil frente al mar.
Pero para que la experiencia sea realmente cómoda y funcional, hace falta algo de planificación. No se trata solo de meter la tabla y salir a la carretera. Una furgoneta bien preparada debe tener espacio suficiente para el equipo, zonas prácticas para el descanso y la cocina, y soluciones efectivas para secar, almacenar y proteger el material de surf. Cada detalle cuenta cuando pasas días o semanas en ruta.
En este artículo, vamos a repasar todo lo que se necesita tener en cuenta para preparar una furgo antes de una aventura surfera. Para ello, hablaremos del espacio interior, del almacenamiento de tablas y neoprenos, de accesorios clave, de consejos eléctricos y de cómo mantener todo limpio y funcional aunque vivas junto a la arena.
Organización interior – Comodidad y funcionalidad para vivir y surfear
La distribución interior de la furgoneta es el primer paso para disfrutar al máximo una experiencia surfera total. Por tanto, es fundamental lograr un equilibrio entre espacio para dormir, almacenar material y moverse cómodamente. Un colchón plegable o abatible permitirá ganar metros útiles durante el día, mientras que los muebles modulares con compartimentos ayudarán a tener todo en su sitio y evitar el caos, especialmente cuando se llega con arena, agua y neoprenos mojados.
Además, es importante prever un espacio específico para cambiarse y guardar el equipo técnico. Instalar una zona de almacenaje bajo la cama o cerca de la puerta trasera facilita el acceso al material sin ensuciar el resto del habitáculo. Si se viaja en pareja o durante largos periodos, incluir una pequeña mesa interior y alguna estantería para objetos personales hará que la experiencia sea más cómoda y práctica, incluso en días de lluvia o viento fuerte.
Espacio para tablas y neoprenos – Orden y protección para tu equipo
El material de surf es voluminoso, frágil y muchas veces húmedo. Por eso, tener un espacio adecuado para guardar las tablas de surf y los neoprenos es clave si se quiere viajar con comodidad y sin dañar tu equipo. Las opciones son variadas y dependerán del tipo de furgoneta y de cuántas tablas hay. Muchos surfistas optan por montar soportes o estanterías elevadas en el techo interior para fijar las tablas de forma segura y sin ocupar espacio útil.
Si se prefiere llevar las tablas fuera, es posible instalar una baca porta tablas en el techo o en la parte trasera. Eso sí, hay que asegurarse de tener cinchas resistentes, fundas acolchadas (con la opción de montar un soft rack) y, si es posible, algún sistema antirrobo. Para el neopreno, lo mejor es contar con un espacio ventilado donde poder colgarlo tras cada sesión. Una ducha exterior con agua caliente y una cuerda o perchero plegable en el portón trasero harán que secarlo sea mucho más fácil, incluso en invierno.
Cocina y autonomía – Comer bien junto al mar
Una parte esencial del viaje en furgoneta es la comida. En consecuencia, tener una cocina básica y funcional permitirá ahorrar dinero, comer mejor y disfrutar aún más del entorno. Un pequeño módulo de cocina con hornillo de gas, fregadero con depósito de agua limpia y sucia, y un mínimo espacio de encimera puede cambiar radicalmente la experiencia.
Para mantener los alimentos frescos, una nevera eléctrica de compresor conectada a una batería auxiliar es perfecto, sobre todo en rutas largas. Si el presupuesto es más ajustado, también se puede optar por una nevera de absorción o de hielo, aunque requieren más atención. Asimismo, llevar utensilios básicos como olla, sartén, cuchillo y tabla de cortar es más que suficiente. Además, una mesa exterior plegable y sillas ligeras permitirán montar un comedor al aire libre con las mejores vistas.
Accesorios clave para una vida surfera sobre ruedas
Viajar en furgoneta implica vivir con menos, pero eso no significa prescindir del confort. Hay una serie de accesorios clave que marcan la diferencia en una experiencia de este tipo. Uno de los más útiles es una ducha exterior, ya sea por gravedad, eléctrica o conectada a una bomba de agua. Después de cada sesión, poder enjuagarse el cuerpo y el neopreno antes de entrar en la furgo es casi un ritual sagrado para cualquier surfista.
Otro accesorio imprescindible es el toldo lateral o una lona enrollable que permita crear sombra o refugio frente al viento. Esto es especialmente útil para cocinar, descansar o simplemente pasar el rato al lado del mar sin quemarse al sol. También se pueden instalar luces LED de bajo consumo para tener buena iluminación interior sin gastar batería, así como una buena extensión eléctrica para cargar aparatos si se hacen paradas en lugares con enchufes disponibles.
No hay que olvidarse del kit de limpieza básico: escoba pequeña, trapo de microfibra y toalla para el suelo. Viajar al lado de la arena implica ensuciarse con frecuencia, por lo que mantener el interior limpio ayuda mucho al bienestar general. Otros extras que suman puntos son: colgadores para neoprenos, altavoz portátil, panel solar portátil, enchufes USB y red de almacenamiento para techos o puertas.
Consejos prácticos antes de salir: Preparación, seguridad y sentido común
Antes de lanzartse a la carretera, hay ciertos aspectos prácticos que conviene revisar para evitar sorpresas. Primero, hay que asegurarse de tener la revisión mecánica al día: aceite, frenos, luces, neumáticos y batería. También se debe revisar si se tienen herramientas básicas, rueda de repuesto, linterna, cargadores y extintor. Una avería lejos de casa o en un entorno aislado puede arruinar la experiencia, y con un poco de prevención es fácil de evitar.
En cuanto a documentación y seguros, no se debe olvidar llevar el permiso de circulación, el seguro vigente y, si se duerme en zonas naturales o playas, informarse sobre la legislación local. En muchas zonas de costa, la acampada libre está regulada, y es mejor evitar multas o problemas con la policía local. También es recomendable instalar cortinas opacas para tener privacidad o usar parasoles reflectantes que eviten la acumulación de calor.
Por último, el sentido común es la mejor herramienta. Hay que ser respetuoso con el entorno, no dejar basura, evitar ruidos molestos por la noche y no bloquear accesos a playas o caminos. Si se comparte el spot con otras furgonetas, saluda, respeta el espacio y cuida el ambiente comunitario. Un viaje de surf perfecto no depende solo del tamaño de la tabla o del swell, sino de lo bien preparado que se está para vivir la experiencia con libertad, respeto y buena energía.
